Cuando escuchamos el nombre de la ciudad de Miami lo que nos viene a la mente es playa, sol, compras, entretenimiento y alegría, en mi caso personal también significa reunión familiar, comida cubana, atracciones y diversión, pero todos esos sentimientos positivos se contraponen con lo que pasa una vez estoy camino a Miami, yo les voy a contar lo que ningún panfleto turístico dice sobre Miami.
Para comenzar, lo que ningún panfleto turístico, ni nadie te va decir es que hay un trafico terrible, digno de cualquier ciudad metrópoli, si vienes a Miami de compras o de paseo, ven dispuesto a pasar horas en un tranque terrible especialmente en las horas pico, y asegúrate de tener un auto con aire acondicionado que funcione bien si no quieres literalmente cocinarte en la espera, además de maneja a la defensiva, aunque pongas luz nadie te da paso. Nos guste aceptarlo o no, Miami es la ciudad más desarrollada de Latinoamérica pero dentro del territorio de los Estados Unidos, por lo tanto los latinos la hemos adaptado a nuestro estilo, con sus ventajas y desventajas, una de las principales desventajas es que los mismos latinos que trabajan en muchos de los centros turísticos ofrecen un servicio pésimo, no se si porque no están cumpliendo su sueño americano o porque les moleste que otros estén disfrutando mientras ellos trabajan, la realidad es que por todos lados encuentras un contraste raro entre gente alegre y gente desdichada que no disimulan su estado de animo en lo absoluto.
Por otro lado hay que reconocer que gracias a los "inventos" de los latinos (si eres latino sabrás a que me refiero), hemos modificado la cultura local típica americana que es basada en la honestidad, ingenuidad y respeto, en una ciudad de gente desconfiada y con malicia, donde ya no puedes dejar el auto sin seguro, donde ni siquiera pude entrar a la piscina comunal en el conjunto donde viven mis padres aún y cuando tenía la llave para acceder, porque mis padres no estaban presentes y donde créanlo o no los mismos latinos se pueden convertir en nuestros peores verdugos. En fin que no todo lo que brilla es oro.
Aún con todo lo que les acabo de contar, el día de hoy terminé las actividades de vacaciones de mis hijos en Miami, en el mejor lugar posible, reunidos en una mesa familiar con una exquisita comida cubana, visitando a los tíos, primos y abuelitos, para mi el mejor refugio en la ciudad del sol.
A pesar de los pro y los contras, Miami tiene su encanto y un sin fin de atracciones por visitar tanto para niños como adultos. Desde Miami Beach, los centros comerciales, Miami Metro Zoo, Museo de Vizcaya, Miami Seaquarium, entre muchas más, ven y disfruta de Miami con la principal ventaja que implica la invasión latina, todo el mundo habla español, así que no tengas miedo a la hora de comunicarte y no permitas que nada ni nadie, te eche a perder tus vacaciones, toma tus precauciones y disfruta de Miami la ciudad del sol.
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