Queridos lectores, como cada jueves aquí estoy, en este encuentro con mis cómplices. Un escape a mi rutina, que no es nada rutinaria y una oportunidad de compartir con ustedes cada semana. Ultimamente por una u otra razón, mi esposo y yo hemos terminando conversando y aconsejando algunas parejas amigas, sobre tips que nos han servido en nuestro matrimonio, ojo no quiero decir con esto que somos perfectos, ambos hemos cometido errores, pero el estar juntos y enamorados después de 17 años de matrimonio, parece que les inspira algunas amistades a preguntarnos la receta. Descubrí que nuestra receta tiene contradicciones necesarias para que el matrimonio funcione y son esas contradicciones las que les quiero compartir el día de hoy. Por loco que parezca aquí les van:
1. Compartir juntos y darse su espacio. El compartir actividades juntos y solos como pareja
(además de hacer el amor, obviamente) solidifica la relación entre ambos y ofrece un espacio de complicidad fuera de la rutina de la casa y los niños. Puedes elegir cualquier actividad que les guste a ambos o simplemente cambiarla cada cierto tiempo. Puede ser ir al gimnasio juntos, a la playa, yoga, correr, nadar, lo que sea que les guste a ambos pero que lo hagan solos y juntos. Mientras que por otro lado, es igual de importante respetar los espacios. Aunque amemos mucho a nuestra pareja no compartimos los mismos gustos en todo, por eso debe haber un momento de intimidad con uno mismo, darse un día, un espacio, para que cada uno esté solo y conste que digo solo y permitirse el privilegio de la soledad, y también porque no, un tiempo para extrañarse mutuamente.
2. Decir lo que sientes y guardar silencio. Esta contradicción tengo que reconocer que me ha tomado mucho trabajo entenderla, ya que, como se habrán podido dar cuenta, decir lo que siento “sin filtro”, es mi especialidad. Poco a poco voy aprendiendo a elegir mis batallas, con esto quiero decir que es tan importante decir lo que se siente en los asuntos importantes, cómo quedase callado en asuntos sin relevancia, donde decir algo solo conllevaría a un pelea sin sentido, en otras palabra ahorra energía para lo que realmente importa.
3. Confianza con suspicacia. Si bien es cierto que la clave del matrimonio es la confianza, no podemos cerrar los ojos o lo que ocurre a nuestro alrededor. El matrimonio es como una flor en tu jardín, una vez decides tenerla tienes que alimentarla, regarla, estar pendiente de ella y sobre todo cuidarla, o vendrá una avispa y se posará en tu flor, no importa que tan cuidada esté, generalmente las avispan se posan en las plantas más florecidas no en las marchitas. Esta parábola aplica tanto para hombres como para mujeres. La suspicacia es una virtud que las mujeres tenemos muy bien desarrollada, solemos llamarla, sexto sentido, si lo detectas toma acción de inmediato, antes de que sea demasiado tarde.
4. Trabajo vs Sexo. Siempre hemos escuchado la vieja frase que no se debe mezclar el trabajo con el placer, pues si y no, ya sé que estoy tocando temas tabúes, pero debo hacerlo. Nosotros con mi esposo somos pareja pero también tenemos familia y somos socios de trabajo,(estoy consciente que no es lo más común), pero precisamente ahi es donde radica la complejidad del asunto. Imagínense si cada unos de los matrimonios tienen problemas y divergencias, en nuestro caso que trabajamos y pasamos 24 horas al día juntos y en la misma oficina, de locos verdad? Pues la fórmula es no mezclar y mezclar a la vez. Me explico, como les he comentado antes gracias a los consejos de la Dra Pilar Sordo, hemos aprendido a diferenciar los temas laborales de los conyugales, pero eso no significa que a media mañana se pueda hacer una pausa en el trabajo y recordarse mutuamente cuanto se aman, aunque un rato más tarde estemos de vuelta en un tema laboral, es decir en conclusión y para ponérselas en palabras simples, con el o la amante, nunca se discute.
Nadie tiene la fórmula mágica para la felicidad, recuerden el poema de Antonio Machado “…caminante no hay camino, se hace camino al andar.” Si a muchos nos han funcionado estas sencillas pero a la vez practicas contradicciones, porque no intentarlo ustedes también, todos somos principiantes en el camino de la vida.
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